Dicen que París es la ciudad del amor. Todos conocemos un buen número de lugares de la capital francesa que nos gustaría visitar y podemos imaginar sus puentes, los Campos Elíseos, la Torre Eiffel, sus cafeterías… Pero la oferta turística de París no se acaba ahí y en los últimos años ha empezado a destacar una alternativa distinta: recorrer las catatumbas de la ciudad.
Las Catatumbas de París
Las Catatumbas de París es un enorme cementerio construido bajo tierra. Tiene una extensa red de túneles y nichos subterráneos, que cada año parecen descubrirse más. Con un sistema de electricidad instalado, las tenues luces facilitan el tránsito de un lado a otro. Aunque es recomendable saber dónde se va a adentrar uno.
Un gran cementerio
Este cementerio fue parte las minas de piedra caliza que se excavaron durante la era romana. Durante el siglo XVIII se decidió transformarlo en cementerio y durante un siglo se acumularon allí los fallecidos en la ciudad. El nombre oficial es Les carrières de París.
Cementerio… y piscinas
En los últimos meses también se han descubierto una serie de piscinas naturales en algunas áreas de las catatumbas. Encontradas por los llamados “exploradores urbanos”, hay zonas en las que el agua se acumula y algunos deciden pegarse un baño. Desgraciadamente, de momento no está abierto al público, aunque las imágenes son muy interesantes de ver. Por la falta de luz natural, lo insalubre que puede estar el agua y cualquier normativa de seguridad, no es recomendable entrar en el agua aunque los más valientes decidan hacerlo.
Pasadizos y más pasadizos
Dicen que bajo París hay un laberinto de pasadizos que están por descubrir. Muchos exploradores deciden adentrarse a buscar aventura y acaban encontrando antigüedades, zonas de antiguos rezos y más y más pasadizos. Ante la imposibilidad de controlar y prohibir los accesos, el ayuntamiento está habilitando y privatizando algunas zonas. Quién sabe si dentro de poco se podrá disfrutar de bares, zonas de juego o alguna de estas piscinas con seguridad.