Hay un must para muchos que viajan y se alojan en hoteles u hostales, se trata del desayuno. Aunque este must también puede estar presente para aquellos que se deciden por aparta hoteles o casas de particulares, porque en las calles de muchas ciudades la oferta gastronómica para desayunar en cafeterías es inmejorable.
¿Por qué nos gustan tanto los desayunos cuando viajamos?
Las razones para responder a la pregunta de por qué nos gustan tanto los desayunos cuando viajamos, son varias y por supuesto se adaptarán al propio ritmo de vida de los viajeros, pero algunas de las más comunes son:
- En los viajes podemos permitirnos el lujo de dedicar un tiempo concreto a desayunar. En nuestro día a día quizás no disponemos del tiempo suficiente para desayunar y lo hacemos simplemente al estilo tradicional, tostada y café y corriendo al trabajo. Sin embargo, estando de viaje, tenemos tiempo para deleitarnos con el lugar en el que estamos y los desayunos son algo muy particular de cada rincón del mundo, no en todos los países se hace de igual manera.
- La oferta culinaria no es la misma. En nuestras casas o en los lugares cercanos a los centros de trabajo, la oferta en los desayunos suele ser la misma, por lo que tenemos poco entre lo que elegir cuando queremos innovar. Ahora bien, cuando estamos de vacaciones, las reglas del juego cambian y podemos elegir entre diferentes opciones, dulces o saladas, donde prime más el yogurt o las frutas.
¿Quién no ha viajado a Turquía y ha disfrutado de un magnífico desayuno tan mediterráneo pero distinto a lo que nosotros estamos acostumbrados? ¿Un expreso y un corneto italiano en cualquier punto de Italia? ¿Unos huevos revueltos y beicon tan típicos en Estados Unidos?