En otras ocasiones hemos hablado del turismo sostenible. Pues bien, dentro de algunas de estas iniciativas que son impulsadas por particulares y no por instituciones, encontramos a viajeros que desarrollan proyectos solidarios durante sus viajes y algunos sin duda son de lo más increíbles.

Un viajero recientemente, decidió durante su recorrido por varios países de Asia en los diferentes poblados donde pernoctaba, decidió regalarle una foto a todos aquellos que lo acogiesen, casi siempre familias tan pobres que ni tan si quiera tenían para hacerse una foto propia.

También hay iniciativas de voluntariado ambiental que los viajeros desarrollan por sí mismos, porque algunos de los aventureros muestran que los hábitos diarios pueden ser más sostenibles si se tienen en cuenta una serie de pautas. De esta manera, tanto la recogida de basura en algunos pueblos, como la organización de cuadrillas para crear zonas de vertederos pueden ser iniciativas que ayuden a esos pueblos a tener unos niveles de salubridad mayores.

Por supuesto, en este tipo de proyectos solidarios de los viajeros, se mantiene el lema de “allá donde fueras haz lo que vieras”, pero se intenta integrar una perspectiva en la que además se aporte algo. No se trata simplemente de dar limosna sino de capacitar, porque obviamente con dinero podremos ayudar, pero sin duda si inculcamos valores y hábitos será posible que esos pueblos puedan tener un desarrollo más progresivo.

Se trata de un ejemplo más de por qué los voluntariados no estructurados no tienen el impacto que de su esfuerzo se esperaría. Sin duda viajar con un motivo solidario es muy reconfortante, pero pensar en esos proyectos seguro que nos hace replantarnos otros itinerarios cargados de solidaridad.

¿Y tú? ¿Conoces a otros viajeros con proyectos solidarios planteados para sus rutas? ¡Compártelos con nosotros!