Jamaica tiene la suerte de contar con una imagen muy idealizada que atrae a gran número de turistas. Si le preguntamos a cualquier persona qué piensa sobre el país, hablará del reggae, Bob Marley, las grandes playas, el buen tiempo, la alegría de la gente… Pero más allá de todos estos tópicos, que buena parte tienen de verdad, existen muchos motivos para acercarse a un país único.

Espeleología

Jamaica cuenta con un gran número de acantilados y cuevas por las que se puede transitar. Muchas de ellas nacen en las mismas playas y tienen piscinas naturales en su interior que uno no espera encontrar. Hasta hay hoteles construidos en cuevas. La variedad de lugares para practicar este deporte y las posibilidades que existen están bien documentadas y no es complicado encontrar información.

Cicloturismo

La variedad de paisajes que existen en el país, con grandes desniveles y que permiten pasar de la playa más blanca al monte más frondoso, son un pequeño paraíso para los aficionados al turismo en bicicleta. Hay multitud de fincas cafeteras en las que se puede pernoctar y, de paso, disfrutar de algunos de los cafés más sabrosos que existen. Además, la naturaleza es muy rica y se descubren con facilidad cascadas, riachuelos, bosques de ensueño… Un turismo muy agradecido para los aventureros.

Buceo

Famosa por su pasado pirata, en Jamaica se puede encontrar hasta una ciudad sumergida en pleno Caribe que se hundió tras un terremoto y que hoy día es Patrimonio de la Humanidad. Con los permisos adecuados, se puede bucear entre sus ruinas y reliquias. Pero para los menos profesionales, también hay gran variedad natural con coloridas zonas y animales que disfrutar bajo el agua. Es un deporte que acostumbran a ofertar en los hoteles y que a nada que uno tenga ganas, merece la pena disfrutar.